La cervecera Heineken y la empresa energética Engie han inaugurado en Sevilla la mayor planta termosolar industrial de Europa. La instalación, que ocupa ocho hectáreas, permitirá a la fábrica de Heineken reducir a más de la mitad su consumo de gas fósil para la energía térmica necesaria en el proceso de elaboración de cerveza.
La planta termosolar está compuesta por ocho hectáreas de espejos parabólicos que concentran la luz solar en un tubo central que contiene agua. Este líquido se calienta hasta 210 grados y se utiliza para cocer el cereal y pausterizar el producto. La potencia de este proceso directo es de 30 megavatios térmicos (MWt) por hora.
Para aprovechar toda la energía termosolar generada durante las horas de radiación solar y mantener la planta a pleno rendimiento de noche o en días sin sol, se ha creado un almacén para conservar 1.115 metros cúbicos de agua caliente. Son ocho tanques gigantes aislados que pueden aportar 68 MWt.
La inversión total en la planta termosolar ha sido de 20 millones de euros, de los cuales 13 millones han sido financiados por la Unión Europea. La planta se ha construido en dos años y ha supuesto 150.000 horas de trabajo.