Las tres presas principales de Nuevo León, El Cuchillo, Cerro Prieto y La Boca, registran su peor almacenamiento en más de una década, según datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua). Con apenas 466.8 millones de metros cúbicos en conjunto, representan tan solo el 32% de su capacidad máxima ordinaria, un nivel alarmantemente bajo.
Este preocupante panorama se suma a los pronósticos poco alentadores de lluvias y a los fuertes calores que aún están por venir en la región. Expertos en cuestiones hídricas han urgido al Gobierno estatal a definir un plan para el manejo responsable del agua y a la población en general a moderar su consumo, ante la creciente preocupación por la escasez de este recurso vital en el estado.
Hasta el momento, las autoridades estatales no han dado respuesta a las solicitudes de entrevista sobre este tema tan crítico. Ante la inacción, la comunidad espera medidas concretas que aborden de manera efectiva esta crisis hídrica y aseguren el suministro de agua para todos los habitantes de Nuevo León en el futuro próximo.